Así lo quiso el destino. TJ Dillashaw (17-5 MMA/13-5 UFC) se vio obligado a colgar los guantes y ponerle punto final a su vida como artista marcial mixto.
El ex monarca de peso gallo de UFC volvió a sufrir otra lesión de gravedad en su hombro y, debido al largo proceso de recuperación, optó por dejar a un lado la actividad. Aunque el luchador aún no hizo pública la noticia, fue el gerente Tiki Ghosn quien informó a los medios de comunicación y reporteros especializados.
Sin embargo, su vida estuvo marcada por la derrota contra las agencias de dopaje. En 2019 perdió el oro al ser noqueado por Henry Cejudo pero además, dio positivo por eritropoyetina y fue suspendido por dos años. Una larga inactividad que le costó demasiado caro.
Debutó como un prospecto, se consagró en la élite, sufrió el duro revés del dopoing y se repuso de cientos de lesiones. TJ dice adios pero su nombre seguirá por siempre.